
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, anunció este lunes que el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) confirmaron la relación entre el síndrome inflamatorio, potencialmente mortal en niños, y el coronavirus.
El Departamento de Salud de la ciudad de Nueva York reportó 145 casos de niños con síndrome inflamatorio multisistémico (MIS-C), antes llamado síndrome inflamatorio pediátrico multisistémico (PIMS-TS).
Este ha sido relacionado durante las últimas semanas con la enfermedad de Kawasaki -presentan síntomas similares- y el síndrome de “shock tóxico”.
El alcalde neoyorquino detalló que 67 niños diagnosticados con el síndrome inflamatorio resultaron positivos para COVID-19 o los anticuerpos del virus, lo que indica que estuvieron contagiados anteriormente.
También indicó que los síntomas adicionales del síndrome incluyen fiebre persistente, irritabilidad o lentitud, dolor abdominal, diarrea, vómitos, sarpullido, conjuntivitis, aumento de tamaño de los ganglios linfáticos, labios o lengua rojos agrietados, manos y pies hinchados, entre otros.
Ante esta situación, el alcalde lanzó una campaña en toda la ciudad para informar a los padres sobre esos síntomas. También enfatizó que la detección temprana puede prevenir enfermedades graves o la muerte y aconsejó a los padres a llamar con prontitud a los pediatras y sus hijos presentan algunos de esos síntomas.
Pese a que el síndrome inflamatorio afecta a los vasos sanguíneo y órganos, a diferencia del COVID-19, los expertos en salud están cada vez más seguros de que están relacionados.