Luego de que este fin de semana el gobierno mexicano informó que la administración de Donald Trump envió al congreso una iniciativa que incluía agregados laborales no contemplados en el protocolo modificatorio, Estados Unidos puso orden a estos señalamientos.
En una carta Robert Lighthizer, jefe negociador del T-MEC por el Departamento de Comercio de Estados Unidos, respondió a la carta enviada por Jesús Seade, principal negociador mexicano para el T-MEC, en la cual protestaba por esta medida de los inspectores y descartó que los agregados sean inspectores laborales.
Dicha misiva fue dada a conocer por el tambié Subsecretario para América del Norte de la Cancillería mexicana, Seade, en conferencia desde Washington donde también aseguró: “No fue un gol a México, fue una decisión unilateral interna de ellos… no existe desconfianza pero sí mucho cuidado de ellos en revisar sus cosas”.
El sábado Seade protestó mediante una carta dirigida al gobierno de Estados Unidos por haber incluido, en su documento enviado a senadores, la designación de hasta cinco inspectores para evaluar la reforma laboral mexicana.
Lighthizer, en cambio, expuso que la propuesta en el Congreso de Estados Unidos “no es para crear ‘inspectores laborales’, sino únicamente agregados y éstos no serán impuestos”.
“Como saben, el mecanismo de respuesta rápida de la USMCA -el primero de su tipo-, permite que un panel independiente compuesto por tres partes, elegido por ambas partes, cuando se soliciten verificaciones in situ en cualquiera de nuestros tres países cuando haya, de buena fe, condiciones”, informó en el Departamento del Comercio.
Este lunes también el canciller mexicano Marcelo Ebrard dijo que aun con estas adiciones a la propuesta no peligraba la rectificación del T-MEC y tampoco era sinónimo de que se aplicara de manera arbitraria en México.
Afirmó que si México no acepta dichas adiciones, no podrían aplicarse.
“Un país no puede asignar agregados en otro, si no tiene la autorización del país anfitrión”, destacó.
Expuso que “no aceptaremos ninguna persona, funcionario de otro país, que tenga funciones más allá de las establecidas en la ley y en los tratados internacionales”.
También dijo que cortesmente informarían a Estados Unidos “que nuestras leyes e implementación tampoco vamos a consultarlas si ustedes no retiran esa iniciativa”.