
Considerada como la mujer del año en su país natal, Suecia, y designada como embajadora de Consciencia por Amnistía Internacional, Greta es un ejemplo de superación. Greta, de apenas 16 años, es activista ecológica, tiene síndrome de Asperger y se convirtió en una referente del medioambiente a nivel mundial.
Entre los grandes reconocimientos que obtuvo de las más influyentes y prestigiosas entidades y organizaciones internacionales, fue designada doctora honoris causa por la Universidad de Mons, la Real Sociedad Geográfica Escocesa le concedió la medalla Geddes Environment y, recientemente, el 21 de julio de este año, recibió el Premio de la Libertad de Normandía.