
Google dio de baja 210 canales de YouTube tras identificarlos como parte de una red que subía videos de manera coordinada sobre las protestas en Hong Kong, similar a las que descubrieron Twitter y Facebook que aparentemente estaban respaldadas por el gobierno de China.
«Encontramos el uso de redes virtuales privadas (VPN, por sus siglas en inglés) y otros métodos para disfrazar el origen de esas cuentas y otras actividades comúnmente asociadas con operaciones de influencia», explicó Google en un comunicado de prensa.