
Investigadores de la University Collage de Londres descubrieron que una dosis de ketamina, medicamento de uso psiquiátrico, podría ayudar a los grandes bebedores de alcohol a reducir su consumo y ganas de beber.
“Dar una inyección de ketamina a los grandes bebedores después de reactivar sus recuerdos relacionados con el consumo de alcohol condujo a una disminución rápida de las ganas de beber”, detallaron.
Mediante una publicación de la universidad, el doctor Ravi Das, autor principal del estudio, explicó que se dieron a la tarea de deshacer los recuerdos de recompensa desadaptativos fundamentales para la adicción a las drogas y el alcohol.
“Desafortunadamente, una vez que se establecen estos recuerdos de recompensa es muy difícil volver a aprender asociaciones más saludables, pero es vital para prevenir una recaída”, detalló.
En el estudio, 90 personas fueron sometidas a la recuperación de sus recuerdos de recompensa que rodeaban su consumo de dicha sustancia nociva.