
Los criminales adoptaban el método de pagos fraccionados para realizar el lavado de los activos, que consiste en efectuar depósitos bancarios en pequeñas cantidades en diversas cuentas. Así lograban burlar a las autoridades.
La operación «Caja Fuerte» es una continuación de una acción similar llevada a cabo el pasado martes, que terminó con 28 detenidos en siete estados brasileños.
Los detenidos este viernes responderán ante la justicia por los delitos de narcotráfico, participación en organización criminal y lavado de dinero, cuyas penas combinadas podrían llegar a 33 años en prisión.