La familia LeBarón pidió al gobierno de Estados Unidos que declare a los grupos del crimen organizado en México como terroristas, lo que generó una reacción de rechazo del presidente Andrés Manuel López Obrador y del canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
El mandatario federal dijo que no permitirá la intervención en México de ningún otro país.
“Por muy graves que sean los problemas que México tenga, no habrá una especie de gobierno mundial”, dijo.
Además de afirmar que el intervencionismo no lo aplicará en México porque “no somos vende patrias”.
“Los problemas los vamos a resolver los mexicanos, no queremos la hegemonía ni intervención de ningún gobierno, no somos vende patrias, no vamos a permitir ninguna amenaza ni ninguna intervención del extranjero, si tenemos un problema, por grave que sea, vamos a acudir a una especie de gobierno mundial, ¿dónde queda nuestra independencia?”, detalló.
También dijo que “lo mejor es que el presidente Trump actúa de manera respetuosa y no insiste en querer imponer una política en nuestro país, mientras hay algunos que están casi casi demandando una intervención en nuestro país, eso nunca lo vamos a aceptar”.
Por su parte, el secretario de Relaciones Exteriores, consideró que es inconveniente e innecesario nombrar de esa manera al crimen organizado.
Explicó que en la legislación de Estados Unidos, clasificar a un grupo como terrorista puede hacer que los gobiernos actúen de manera directa, lo cual no es aceptado por el gobierno de México.
“No necesitas designar o clasificar un grupo específico como terrorista para actuar en contra de él. Hay muchísimos casos, como las extradiciones en curso, que demuestran que sería innecesario. Además de inconveniente, innecesario”, apuntó.
Detalló que “el tema narcoterrorismo tiene una implicación jurídica. Consideramos que todos los actos homicidas que afectan a la sociedad son gravísimos. Pero el narcoterrorismo tiene un impacto jurídico internacional, porque hay una legislación norteamericana que posibilita, cuando se declara a un grupo terrorista, entonces se invocan esas disposiciones para actuar de manera directa. Eso México jamás lo aceptaría”.
Luego de estas declaraciones, Julián LeBarón señaló que “si el canciller se atrevió a decir que es terrorista un hombre que entró a un Walmart y mató a unos compañeros mexicanos, y ahora está diciendo que 20 o 50 personas que acribillaron a unas mujeres, unas mamás con sus hijos cerca de su casa, que a esto no hay que llamarle terrorismo. Hay que hacer un llamado a los ciudadanos, especial,ente a las víctimas, para decir las cosas como son. Si él no lo hace, nosotros nos atrevemos a decir las cosas como son”, denunció en una entrevista radiofónica.
En próximos días el presidente López Obrador recibirá a la familia LeBarón para mostrarles todos los avances en la investigación del caso ocurrido entre Chihuahua y Sonora, en la que colabora el FBI.